miércoles, 15 de abril de 2009

Desde Alemania con amor

Pues sí... Al final, como quien no quiere la cosa, ha pasado ya mes y medio desde que publiqué la última entrada. El tiempo no corre en vano, dicen, y cuando uno está absorto en una infinidad de cosas -no todas importantes, para qué engañarnos- parece que el tiempo corre sin darnos cuenta. Y claro, las consecuencias ya se ven.
Pero bueno, hecho el propósito de enmienda, intentaré no sólo actualizar más amenudo el blog sino, también, mantenerme más informado del mundo blogosférico. De momento, la entrada de hoy la voy a dedicar sólo a contar cuestiones más o menos intrascendentes y a hacer un recorrido por mis experiencias últimas (ya, en alguna ocasión, hablé del necesario exhibicionismo impúdico, y sí, de eso se trata aquí, al fin y al cabo).

Para mantener informada a la audiencia, desde hace dos semanas y media tengo la suerte de estar en la ciudad de Münster, donde estoy llevando a cabo una -esperemos- fructífera estancia de investigación de 6 meses. Los preparativos del viaje y las innumerables cuestiones del trabajo que parecían acumularse a última hora, en una especie de complot, son, en parte, cuasa de la demora en dejarme pasar por estos lares. Pero bueno, una vez todo solventado, aquí me teneis en Alemania.
Como decía, llegué el día de uno de Abril después de un viaje que se me hizo interminable: 10 horas, por culpa de la maldita escala de 7 horas que me tuve que comer en Palma de Mallorca. Y sí, podría haber ajustado mejor los horarios (eso sí, vuelos directos desde Valencia no hay), aunque qué queréis que os diga: la cuestión pecuniaria era importante xD
Una vez ya aquí, en Münster, tenía una habitación en una Wohnheim (una especie de residencia), pero taaaaan lejos de la ciudad que me entró la depresión (y además sin posibilidad de tener acceso a Internet -una causa más para el retraso en actualizar el blog :P). Además, la gente de la residencia era demasiado antisocial. Mirad que intenté hablar con la gente, pero nada, todo el mundo muy muy independiente y a sus cosas. Así que empecé la busqueda de una WG-Zimmer (un habitación en un piso compartido). Así por lo menos los compañeros de piso no podrían huir y tendría alguien a quien taladrar xDD.
Parece mentira, pero para ser Münster una ciudad universitaria (el 60% de su población son estudiantes), lo de encontrar piso no ha estado nada fácil. Afortunadamente, el Lunes pasado dí con uno céntrico, bien situado, con gente maja y agradable y con Internet. Así que nada, por eso me tenéis por aquí otra vez. No os agobiaré contándoos cosas del trabajo, las reuniones con el profesorado del departamento de filosofía de aquí y demás cosas aburridas, así que, en lugar de eso, ya os iré contando cosas interesantes y curiosas de la ciudad.

Por lo demás, dejo ya aquí de escribir y os envío un saludo a todos. En especial a Dona Rebel.lada (haz extensible el saludo a los demás, porfa!).

2 comentarios:

  1. Sin dudarlo!!!!

    Me alegro de tener nueva tuyas y que, aunque no puedas disfrutar de aquel superhabitación con baño/cocina unidos, en compañía se vive mejor :P

    Por aquí las cosas van... te hechamos en falta y el clima parece estar igual XD Nieve, frío y LLuvias, será una señal?

    Bueno disfruta y yo te sigo por estos mundos de exhibicionismo puro y duro ;)

    Un beso!

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  2. Luego dicen que todos somos iguales! Unos en alemania y otros aquí...¡qué envidia! Ya me puedes ir haciendo una lista de sitios de direcciones para alojarme una semanita y de lugares para visitar este verano, autobuses, precios, bares...
    Un saludo desde Estepona: Emilio
    PD. Si hay alguna conferencia o alguna actividad destable sobre europa y/o las elecciones, envíame algo.

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